Edit Content
 
Ñuñoa
 
El consumidor moderno no es el sujeto es el producto

En la actualidad, el estilo de vida ha pasado de una sociedad productiva a una sociedad consumista, pasamos de realidades sólidas y duraderas a realidades líquidas y flexibles.

En la era del consumismo, lo importante no es conservar objetos, sino renovarlos constantemente

La lógica del consumo es la que caracteriza a este nueva forma de ser humano, el problema de la modernidad va desanclado de lo pesado, nada debe ser adquirido para una experiencia duradera, la idea lograr satisfacer a experiencias cortas, que sea una necesidad volver a vivir esa experiencia pasada. De ahí que cambiamos productos no por que están en desperfectos, si no que sentimos que están obsoletos.

Antes de consumir, hay que convertirse en producto, y es esa transformación la que regula la entrada al mundo del consumo.

Lo que queremos es no dejar de desear, es el deseo permanente, somos animales que nunca sentimos estar satisfechos, No hay satisfacción posible, ya que el consumidor ideal es que nunca consigue ser satisfecho, no tiene vínculos profundos y la renovación funciona a todo nivel.

Se genera en el individuo nuevos estándares de felicidad basados en la libertad de elección. Sin embargo, esa felicidad está condicionada a la capacidad del poder adquisitivo: el que decide qué compra es porque tiene la riqueza suficiente para estar a la altura de sus propias aspiraciones.

Así como se crean consumidores, también se crean sociedades donde se humillan a los que no tienen esta capacidad satisfacer  el consumo, al no tener acceso a un estatus económico se va construyendo una sociedad desigual y peligrosa.

Esta gente que se siente despreciada nos está diciendo algo, necesitamos salirnos de esta locura de consumismo sin sentido.

La gran utopia es vivir en un constante status quo, donde el futuro no existe. Todo lo social es ambivalente, las tecnologías de la información han ayudado a muchos países a crecer y lograr empleabilidad a mucha gente, simplemente debemos entender los peligros que las nuevas tecnologías nos ponen en manifiesto.

En el libro Modernidad líquida, el sociólogo Zygmunt Bauman es capaz de explicar los fenómenos sociales de la era moderna y qué es lo que nos diferencia de las generaciones anteriores. A partir del año 2000, año de publicación de Modernidad líquida, el filósofo polaco publica una serie de obras que resumen sus conceptos sobre la realidad que nos rodea: Amor líquido (2003), Vida líquida (2005) y Tiempos líquidos: vivir una época de incertidumbre (2007).

Estamos siendo observados pero no lo sabemos, nunca debes saber que te vigilamos.

Nuestra relación con las redes sociales da cuenta de una forma silenciosa de capturar nuestra información privada,  después se te incorpora en una categoría que corresponda al perfil de información a partir de nuestros gustos y comentarios. Todo está organizado de tal manera que todo lo que hacemos es un objeto de consumo, la manipulación es a partir de nuestros datos que sin saber vamos dejando en los sitios o aplicaciones que utilizamos a diario.

En la sociedad de consumidores, los individuos deben convertirse en una inversión, para ello deben adquirir un valor para sí mismos, aumentando su atractivo como productos disponibles para ser poseídos en ese turbulento mar llamado mercado.